Casa granero

Reforma de un granero en una dehesa

La Reforma de este antiguo granero extremeño reconvertido en un pabellón de fin de semana, plantea una arquitectura en voz baja: toda ella es un ejercicio de contención y de integración en el paisaje. Nada es sobrero o gratuito, simplemente hay el espacio que se necesita para confinarse un par de días.

La estructura principal de la casa la definen los muros existentes de piedra seca, que se reconstruyen y perforan para adaptarse a la nueva organización del espacio: una sala d estar central y dos habitaciones en los laterales.

La construcción de toto el proyecto se ha ejecutado con un alto grado de artesanía: se seleccionó la piedra – pizarra y granitos – de una pedrera cercana; se talaron y se secaron los troncos de los castaños que posteriormente servirían para las cerchas, muebles y carpinterías; el hormigón de las lindas, los zunchos perimetrales, las chimeneas y los lavamanos contienen áridos y tierras de la zona; también se manipulo el cobre para fabricar in situ todas las griferías.

Con el objetivo de acercar la vivienda más al paisaje, abrirla al exterior, se plantean unas grandes aberturas a lado y lado de la sala de estar, transformando la vivienda en una casa pasante.

Estos amplios marcos de madera no sólo enmarcan el paisaje si no que transforman este espacio casi en un porche. Estas cajas no dejan de ser ventanas habitadas: artefacto que contienen sofás, estantes, bancadas…y que aportan la domesticidad que el interior de una casa pide. De esta forma las fachadas se convierten en el reflejo de esta vida interior, en lugar de responder a criterios puramente compositivos.

Coautor: Jorge Vidal

*Premio FAD Interiorismo 2023

*Premio BEAU XVI  2023 Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo